Estrategias de comunicación. La comunicación oral y escrita y su tratamiento en las aulas. Procedimientos para el fomento de las cuatro habilidades en el aprendizaje de lenguas extranjeras.
Hola a todos y a todas y
bienvenidos de nuevo al blog. Hoy toca hacer una entrada nueva y en este caso
esta va dedicada al tema “Estrategias de comunicación. La comunicación oral y
escrita y su tratamiento en las aulas. Procedimientos para el fomento de las
cuatro habilidades en el aprendizaje de lenguas extranjeras” impartido por la
profesora Cristina Rodríguez a lo largo de tres sesiones (09/01, 10/01 y
17/01). En estas sesiones, como bien indica el título del tema nos hemos dedicado
a mejorar nuestros conocimientos acerca de como trabajar las cuatro habilidades
en el aprendizaje de lenguas extranjeras, siempre teniendo en cuenta un término
acuñado recientemente y que cada vez está tomando más importancia en las aulas
de idiomas, la MEDIACIÓN, cuya implementación
en el aula se ve facilitada por el nuevo Companion Volume del MCER (2018), que complementa y suplementa los descriptores de mediación lingüística.
En un principio todos en clase estábamos algo
perdidos con este término, ya que principalmente todos lo asociábamos al ámbito
de resolución de conflictos y poco tenía que ver a nuestro parecer con el campo
de las lenguas. Pues bien, la mediación en el aula de lenguas consiste en transmitir
un mensaje a alguien que por algún motivo no ha sido capaz de comprenderlo. Se trata de crear puentes. Puede
mediarse en la lengua meta o en cualquier otra lengua que sirva como vía de
comunicación y que ayude a decodificar ese mensaje que el receptor no ha
conseguido captar. Por lo tanto, este término cobra gran importancia para
nosotros como futuros docentes de lengua extranjera, ya que es una situación
real que se da en el aula y en el día a día de nuestro alumnado cuando entran
en contacto con diferentes lenguas y tenemos que sacar el máximo partido a
estas oportunidades que se nos brindan para no solo practicar la lengua meta,
pero también mostrar las conexiones que existen entre las diferentes lenguas y el
potencial de su bagaje plurilingüe. Por lo tanto, la mayor parte de la primera
sesión, la dedicamos a adquirir conocimiento acerca de este concepto nuevo para
la gran mayoría y a aprender mediante ejemplos reales aportados por la
profesora cómo introducir la mediación en las aulas (Ej. Vídeo AntonioBanderas Slang, enseñar expresiones que ellos usen o que se usen
normalmente en su entorno a personas que no hablen su L1).
La segunda sesión dedicada a este
tema la comenzamos con una actividad en grupo. En grupos de cuatro personas
creamos una actividad de mediación y cubrimos una ficha sobre toda la
información esencial para contextualizar y poder desarrollar dicha actividad de
aula. Nuestra actividad no estuvo muy acertada, ya que la necesidad de
mediación no era real y además un alumno hacía por otro lo que ya podía hacer
por sí mismo, así que perdimos un poco la necesidad que haría que esta
actividad funcionase. Sin embargo, la profesora Cristina nos dio algunas ideas
sobre cómo solucionar los problemas de diseño que tenía nuestra actividad, y si
juntábamos en el aula a alumnos que hablaban la misma L1 o tenían una lengua
franca común (normalmente inglés) para que compartir información en dicha
lengua y después transmitiesen a toda la clase aquello que habían compartido en
su L1 pero en español (la lengua meta), esta actividad de mediación sería mucho
más real y tendría mucho más sentido para el desarrollo de la clase. He de
decir que esta actividad me ha sido de mucha ayuda, ya que considero que es una
de las primeras veces que se nos pregunta la razón por la que hemos creado/elegido
la actividad que hemos presentado. Creo que esta pregunta es clave para crear
materiales adecuados para el aula que tengan un impacto real en el proceso de
aprendizaje de nuestro alumnado y cuya finalidad vaya más allá de la simple
práctica del idioma, en definitiva, que su objetivo principal sea funcional. La
segunda parte de esta sesión giró entorno a los tipos de actividades comprensión
escrita y oral, en los que desglosamos los tipos de lectura y escucha
(extensiva / intensiva), los pasos a seguir para que el alumnado saque el
máximo partido a las actividades y el papel del profesor entre otros aspectos. En
esta segunda parte de la sesión lo que más me ha gustado han sido las
herramientas de búsqueda de textos orales reales (Audiolingua, storycorps,
Breakingnewenglish y audioguías) que dejo aquí enlazadas para tenerlas disponibles
cuando quiera hacer uso de ellas o para que vosotros las aprovechéis. Por otro lado,
también disfruté mucho de la parte en la que tratamos los factores que afectan
el aprendizaje, y me gustó mucho aprender sobre la tolerancia a la ambigüedad.
Para mí es un concepto totalmente nuevo, y más aún en relación con la enseñanza-aprendizaje
de idiomas. Creo que es muy interesante cómo una persona con alta tolerancia a
la ambigüedad, que no se estresa en situaciones en las que no entienda lo que
se le dice, y tiene capacidad para permanecer en situaciones confusas, tiene mayor
facilidad, o menos barreras a la hora de aprender un idioma.
Finalmente, la última sesión estuvo
dedicada a las actividades de expresión e interacción escrita y oral y a la
evaluación, más concretamente a la creación de rúbricas. En cuanto a la primera
parte, me resulto muy interesante poder comprender la expresión escrita como
parte de un proceso, más que como un producto final que debe ser corregido y
calificado. Creo que esta perspectiva es muy positiva, tanto para docentes como
para el alumnado, ya que no solo fomenta el esfuerzo y la corrección de errores
en el alumnado, sino que también el docente dispone de material físico en el
que se aprecia la evolución y el esfuerzo constante del alumnado por superar
los obstáculos que se le presenta cuando aprende un nuevo idioma. Creo que fue
muy interesante poder compartir opiniones, métodos o estrategias a cerca del
feedback que se proporciona al alumnado y cómo se presenta, y sin duda me quedo
con los códigos de colores, señalización de errores pero no corrección por
parte del docente y el método o regla “Two stars and a wish” (también útil para la evaluación entre compañeros). También creo que
es muy positivo que la profesora Cristina compartiese con nosotros herramientas
útiles para hacer más fluida la corrección en plataformas online (EdModo y
Kaizena), ya que a pesar de que algunos tenemos experiencia docente, no conocemos
este tipo de plataformas o extensiones que pueden ayudarnos a que la carga de
trabajo sea más llevadera y nuestras correcciones más efectivas y en definitiva
más formativas (no simplemente una nota sin ningún comentario de mejora o
especificación).
A pesar de que también realizamos
más actividades en el aula, como la búsqueda de dinámicas para trabajar y fomentar la expresión oral en
el aula, o la organización y estructuración de las mismas, prefiero centrarme
en la creación de rúbricas, ya que considero que es la tarea más complicada que
hemos llevado a cabo en el aula en estas tres sesiones. Primero me gustaría
plasmar aquí que la clave para crear una buena rúbrica es definir y explicar
todos los ítems, y que no debemos caer en juicios de valor o basarnos en las
dicotomías (lo hace /no lo hace) para la creación e implementación de nuestras
rúbricas. Una rúbrica debe ser clara y basarse en hechos evaluables (medibles)
para que el propio alumnado pueda tomar parte en su proceso de evaluación y la
tenga como referencia para llevar a cabo un proceso de autoevaluación.
En definitiva, en las clases de
la profesora Cristina he aprendido mucho en muy poco tiempo. Me ha sido
completamente imposible plasmar todas mis impresiones y reflexiones en esta
entrada de blog, porque si no tendría que crear dos y una de ellas estaría
enteramente dedicada a la evaluación y a la creación de rúbricas. En estas
sesiones he aprendido a centrarme más en el objetico funcional de las tareas y
dinámicas que creo para mi alumnado; he afianzado mis conocimientos acerca de
la evaluación formativa; he terminado de comprender que el aprendizaje y las
tareas son un proceso y no un resultado final que hay que calificar; y finalmente,
que las rúbricas son tremendamente útiles para la evaluación formativa y la
autoevaluación, pero que voy a necesitar un tiempo para crearlas decentemente y
sin que me lleve 3 horas redactar un ítem.
¿Y vosotr@s, qué habéis
aprendido? ¿Tenéis la misma sensación con las rúbricas?
Ola Raquel!
ResponderEliminarGustoume moito a túa entrada porque explicas de forma moi completa os conceptos tratados durante a aula, especialmente o de mediación, que como ben indicas era descoñecido para a maioría de nós. Ademais, concordo contigo en que é un aspecto moi importante dentro da labor docente, e por iso é necesario que entendamos ben en que consiste. Por outra parte, cando falas do feedback mencionas un método chamado “Two stars and a wish” o cal eu non coñecía, así que entrei no enlace e pareceume un método moi interesante que pode ser beneficioso ao recoñecer non unicamente os puntos débiles do alumnado senón tamén os fortes, xa que isto é moi importante. Por último, tamén estou de acordo en que a creación da rúbrica foi máis complicado do que pensara inicialmente, e que se quero sacar partido da súa utilidade tamén vaime levar tempo crealas!
Unha entrada moi interesante!
Iria.
¡Hola, Raquel!
ResponderEliminarMe ha gustado la manera en la que has tratados todos los temas vistos en clase. En particular me resultó bastante interesante el concepto de la tolerancia a la ambigüedad, que también se explicó en el grupo 1. Es sorprendente que este elemento sea un factor tan importante en el aprendizaje de lenguas, y creo que debería tenerse en cuenta no solo en la enseñanza de idiomas, sino también en otros ámbitos educativos. Creo que muchas veces el alumnado se puede sentir frustrado y pensar que no avanza porque procesa la información de manera diferente y tiene baja tolerancia a la ambigüedad, tantas veces presente en los idiomas.
¡Un saludo!
Carla Ingeian
¡Hola, Raquel!
ResponderEliminar¡Excelente entrada! Haces un fantástico resumen de los contenidos que vimos en el aula. Tienes razón que no estuvimos acertados en el grupo con la creación de nuestra actividad, pero gracias a Cristina le sacamos algo de provecho a la actividad que realizamos. Tampoco nos fue fácil crear la rúbrica para la actividad, coincido contigo en que las rúbricas son herramientas útiles para la evaluación formativa y para la autoevaluación. De todos modos, requiere práctica conseguir hacer una rúbrica y no un baremo de cantidad para la actividad.
Un saludo,
Judit
Hola compañera!
ResponderEliminarMe ha encantado tu entrada! Has sintetizado las actividades que hemos realizado en el aula. Además,opino como tú que la expresión escrita debe ser corregida y calificada. El docente cumple un papel fundamental en este proceso ya que debe motivar al alumnado en su proceso de producción escrita y oral y ayudar al alumnado a que aprenda de sus propios errores.
Un saludo
Trinidad
Ola, Raquel!
ResponderEliminarGrazas por unha entrada tan completa. A min tamén me pareceron moi interesantes as reflexións que fixemos na clase sobre as formas de corrixir a expresión escrita. Como ti ben dis, hai que ver a expresión escrita coma un proceso. Non se trata de poñer unha nota a un produto xa finalizado e inalterable e marcar todos os erros en vermello, trátase de acompañar ao alumno no proceso de escritura e conseguir que sexa quen de aprender de forma significativa. Neste sentido, gustoume moito a idea de empregar un código de cores que sirva de guía para que o alumno corrixa o seu propio traballo e busque solucións.
Saúdos!
Aarón
¡Hola, Raquel! He venido por aquí a echar un vistazo a alguna de las entradas del otro grupo, ya que tenía curiosidad y aún no había visitado ninguna. En primer lugar, me gustaría felicitarte por tu enfoque, puesto que me ha parecido muy personal. Creo que es muy interesante, ilustrador e instructivo que vuelques tus reflexiones e impresiones acerca de lo que hemos visto y hecho en clase, ya que, desde mi punto de vista, ayuda a comprender e interiorizar la información de una manera más directa y sencilla. Asimismo, y como bien destacas en tu entrada, concuerdo contigo en que, durante nuestra labor como docentes, siempre tenemos que tener en cuenta y bien presente el objetivo que perseguimos en todo lo que hagamos durante todo momento. Sin él en mente es prácticamente imposible que podamos crear o planear, por ejemplo, una actividad que tenga un sentido completo, una aplicación real o básicamente, y como tú bien decías, que sea funcional.
ResponderEliminarPor otro lado, me ha parecido interesante que hayas destacado el concepto de tolerancia a la ambigüedad. Lo cierto es que yo también lo desconocía y creo que es fundamental en el aprendizaje de idiomas, especialmente para no perder la motivación, evitar la frustración y entender que se trata simplemente de un proceso complejo en el que, en algunos momentos, tendremos que enfrentarnos a situaciones como estas en las que estaremos un poco o bastante perdidos. A este respecto, también es importante concebir, como comentabas, la expresión escrita como parte de un proceso en vez de como “un producto final que debe ser corregido y calificado”. Considero que este sistema de ir marcando los errores para que los alumnos procedan posteriormente a su corrección es mucho más positivo y productivo y les ayuda infinitamente más en su proceso de aprendizaje. Para finalizar, estoy totalmente de acuerdo contigo en las impresiones que recoges sobre las rúbricas, ya que, a pesar de resultar muy útiles a diferentes niveles, presentan una elaboración compleja, laboriosa y lenta hasta que no se posee el conocimiento, la experiencia o la práctica necesarios.